Es nuestra intención que la mayoría de hermanos nos faciliten sus direcciones de correo electrónico para así poderlos tener informados de todas las actuaciones, acuerdos y actividades que se lleven a cabo, manteniendo la privacidad de cada uno de los hermanos, con ello conseguiríamos ahorrar papel, preservando así el medio ambiente
Formación y Cultos
Establecer un plan de formación dirigido a nuestros socios como a los fieles en general.
Potenciar los actos a la Virgen durante el mes de Mayo, mes mariano por antonomasia.
Instaurar en octubre el mes del Rosario.
Participar activamente en la preparación de la festividad de la Inmaculada.
Organizar alguna actividad de hermandad distinta a los actos de culto, en el que se fomente la convivencia entre los socios como, por ejemplo, una jornada de la familia, un viaje cultural, una peregrinación a un santuario, actos de hermanamientos con otras cofradías homónimas, una jornada cultural, etc.
Caridad
Se potenciará, siempre de acuerdo con Caritas parroquial, la participación en cuantas campañas se organicen en este campo y otras que pudieran ir surgiendo.
SOCIO/A ORDINARIO, es aquel, que en la procesión desfila alumbrando o portando el paso de la Virgen.
DAMAS DE LA VIRGEN que son las mujeres que, vestidas de “mantilla”, acompañan a la Virgen del Rosario durante su desfile procesional, formadas en filas, portando una vela en la mano y llevando colgado del cuello, el Escapulario de la Hermandad.
Procurar entender su edad y sus actividades propias, con el fin de encontrar su propio espacio en el seno de la hermandad, siempre sin olvidar aquellas actividades parroquiales en las que también participan.
Elaborar un elenco de actividades juveniles de manera periódica: actividades de ocio, encuentros de oración, convivencias veraniegas, retiros espirituales, marchas o peregrinaciones juveniles, etc.
Es también necesario que desde la hermandad se cuide y se fomente las actividades de caridad y acción social para lo cual habrá que programar y fomentar aquellas actividades juveniles que se acerquen a los más pobres y necesitados de nuestra hermandad, de nuestra parroquia o de la Iglesia en el mundo.